Con una fase de adiestramiento naval, el que estuvo integrado por catorce unidades de superficie y un helicóptero H3 y bajo la coordinación del Comando de Adiestramiento y Alistamiento de la Armada, la Fuerza completó la quinta Etapa de Mar.
El despliegue incluyó a los destructores ARA “La Argentina”; ARA “Almirante Brown” y ARA Sarandí; las corbetas ARA “Espora”, ARA “Rosales”, ARA “Robinson” y ARA “Gómez Roca”; los patrulleros oceánicos ARA “Piedrabuena”, ARA “Almirante Storni” y ARA “Contraalmirante Cordero”; el buque logístico ARA “Patagonia” y los avisos ARA “Teniente Olivieri”, ARA “Puerto Argentino” y ARA “Bahía Agradable”.
Estos medios pertenecen a la División de Destructores, la División de Corbetas, el Comando Naval Anfibio y Logístico, la División Patrullado Marítimo y la Segunda Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros.
Las acciones fueron dirigidas por el Estado Mayor del adiestramiento naval integrado, el cual fue establecido a bordo del ARA “La Argentina”, desde donde se dirigieron una serie de ejercicios tácticos enmarcados en la llamada “Etapa Artillería”.
Además los ejercicios incluyeron el lanzamiento y la recuperación de aeronaves, maniobras de cubierta cruzada, operaciones de anavizaje y despegue, como así también el reabastecimiento en el mar, según se consignó.
El ejercicio incluyó maniobras de combate y entrenamiento, evoluciones tácticas y una formación de defensa antiaérea en las que las unidades participaron en una serie de maniobras coordinadas.
A su vez se realizó una práctica de tiro naval efectivo, donde las unidades se formaron para hacer una corrida de prueba de sus sistemas de armas, utilizando cañones de diferentes calibres.
Todas las actividades contaron con la presencia de cadetes de la Escuela Naval Militar y de oficiales egresados recientemente, que cursaron la especialización en artillería en sus primeras prácticas de tiro efectivo en el mar.
