Si bien la feria comenzó este martes, el lunes se realizó la presentación del informe SOFIA 2024, el cual fue dado a conocer a través del congreso de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), tras lo cual el director adjunto del organismo internacional Audum Lem dialogó en el multimedios “Phantom” en el programa “Zarpamos” que se emite de lunes a viernes de 8 a 12.

La diversidad de naciones participantes, como así también de asistentes hacen que la reconocida feria sea la mezcla de varios sectores: armadores, mayoristas, trabajadores, representantes de estos, degustaciones, rondas de negocios, todo el ámbito es propicio para dar mayor visibilidad a un producto noble como el pescado –léase mariscos también- para que el mundo siga consumiéndolos.

En esta promoción de productos, curiosamente la organización de la feria no admite la presencia de menores de 18 años en la feria que ni siquiera es abierta al público en general, sino que está reservada para expositores, medios de prensa, funcionarios y empresarios, entre los varios selectos concurrentes.

Es que a través de los jóvenes es desde donde se debería trazar el camino para un consumo que llegaría a través del hábito, pero sin promoción directa, sin el contacto con los potenciales consumidores (y por ende compradores) se le va a seguir haciendo difícil al sector pesquero el poder “entrarle” a los jóvenes, en definitivo los adultos de ese mañana que llega tan pronto.

Todo esto no empaña la excelente organización mostrada al menos en la primera jornada de concurrencia masiva. Si bien el tránsito al ingreso sobre todo es un verdadero caos por la cantidad de vehículos particulares (está vedada la circulación de camiones) y la concurrencia es absolutamente masiva, todo se desarrolla con total normalidad, con indicadores claros de los sectores, con lugares de aseo en óptimas condiciones y sobre cordialidad en cada uno de los puestos de atención.

Cinco son los pabellones o “halls” como los llaman por estas tierras españolas, con cuatro pasillos cada uno de ellos, más un auditorio, cómodo lugar para la prensa, centeneras de lugares en el “parking” y una correcta atención hicieron que al menos la primera jornada se haya disfrutado, tal como lo reflejó el Multimedios Phantom durante todo el día.