Inicio » Buscan revolucionar la forma de abordar el desperdicio pesquero
Desde hace casi una década, el dirigente gremial Jorge Frías viene bregando por que se realice un aprovechamiento total de los recursos que se capturan. Hace casi diez años se descartaba lo mismo que marcaba el índice de pobreza en la Argentina y que llegaba al 32%.
“Esto es inadmisible”, señaló oportunamente el Secretario General de la Asociación Argentina de Capitanes, Pilotos y Patrones de Pesca, en ocasión de presentar el tráiler del documental “Descarte Cero”, un film que expone testimonios que sobre la problemática en distintas pesquerías y pretende ser un llamado de atención a las autoridades para que se mitiguen las prácticas que terminan con miles de toneladas de pescado en el fondo del mar.
Es evidente que poco (muy poco) ha cambiado desde hace diez años. Hoy la preocupación es la misma y los oídos sordos hoy se siguen multiplicando.
Lo que no se ve ni se escucha en nuestro país lo empezaron a hacer otros, tal como ocurre en Finlandia, donde una empresa creó un producto a partir de la trucha arcoíris que no solo reduce el desperdicio sino que también podría revolucionar la manera en que se usan los subproductos del mar.
En la actualidad, tal como lo expresó Frías hace diez años, se sigue en el mismo camino, donde una buena parte de lo que se extrae del mar se descarta, dado que al no poder llevar a puerto la especie para la cual ha sido despachada la embarcación, se decide tirarla al mar.
No es un mero capricho esa metodología, ya que si el buque amarra con un porcentaje mayor al bycatch permitido, el capitán es sancionado, como también lo es si descarta pescado al mar.
Incongruente pero real. Inexplicable por donde se lo mire e incomprensible por donde se lo mire, con tantos niños –y grandes- que hoy sufren, sí sufren, por hambre.
La empresa finesa de referencia tendrá en más de 500 establecimientos un modelo de economía circular aplicado a la industria alimentaria mediante una tecnología que ha sido desarrollada para conseguir recuperar especies y nutrientes de pescado y mariscos y transformarlos en más alimentos que son aptos para el consumo humano y para la utilización en la industria alimenticia.
El trabajo tecnológico desarrollado, según señalan desde Finlandia “se puede aplicar a varias especies de peces, ampliando así las oportunidades de reducción de desechos en toda la industria”.
Y como evidentemente en otros lugares “la ven”, ya se están buscando establecer convenios con asociaciones internacionales y pensando en otorgar licencias de su tecnología a empresas procesadores de pescado en todo el mundo.
Evidentemente no era tan difícil ponerse a trabajar al respecto, solo se tendría que haber oído a las voces de la experiencia y del estudio, que están simplemente a la vuelta de la esquina, pero el egoísmo, la desatención y la voracidad a veces pueden más.